30 de mayo de 2010

PASEO EN EL DOUBLE DECKER.


Uno de los paseos típicamente turísticos de Ushuaia es el Double Decker. Transcurría la tarde en la Ciudad y sin mucho más para ver fue que decidimos tomar este simpático ómnibus de dos pisos Londinense para recorrer la ciudad desde otra perspectiva.
El mismo funciona desde el año 2000 y recorre los principales puntos de la ciudad con guía bilingüe a bordo. Así fue como a las 15:30 corrimos al famoso "bondi del fin del mundo" desde media cuadra hasta el lugar de donde sale en San Martín y Juana Fadul.
Casi no llegamos pero al fin y al cabo llegamos. El micro estaba casi vacío y éramos uno de los pocos hispano parlantes allí a bordo.
La recorrida en el Double Decker o colectivo de dos pisos incluye su recorrida por los edificios históricos de la Ciudad. Entre ellos se destaca la sede del Correo Argentino realizada íntegramente por los presos del Presidiario del Fin del Mundo o Presidio de Ushuaia.


Nuestro paseo continúa por las principales calles del casco histórico de Ushuaia desde el que nos han explicado que hasta 1960 llegaba hasta la calle Gobernador Paz (la cuarta calle de la ciudad desde la costa), calle en la que queda hoy la casa de Chiqui en donde nos hospedamos.


Seguido a ello entramos al Museo del Presidio y Museo Marítimo lugar en donde se han bajado el 70% de los pasajeros. Cabe destacar que el Double Decker une los tres museos más importantes de la ciudad, a saber: Museo del Presidio, Museo del Fin del Mundo y Museo de la Antigua Casa de Gobierno (todos ellos muy cercanos entre sí y que bien pueden hacerse a pie como lo hicimos nosotros en su momento).



Una vez que se bajaron una gran mayoría de los pasajeros, el camino continuó por el casco céntrico pasando por más casas históricas.


Mientras tanto nos dirigimos por la calle Gobernador Paz hacia el Parque Centenario en donde se encuentra uno de los puntos panorámicos de la Ciudad.


Luego seguimos nuestro camino hacia donde se encuentra la Bahía encerrada y el actual aeródromo de la Ciudad, lugar en el que antiguamente funcionaba el aeropuerto de Ushuaia. Desde allí nos tomamos la foto que aparece en la portada de esta entrada y las que se encuentran más abajo.


A medida que bajábamos, podíamos observar los picos nevados de las montañas que rodean a la Ciudad de Ushuaia.






Con nosotros el protagonista del paseo!!!




17 de mayo de 2010

RECORRIDA EN VELERO POR EL BEAGLE.

Amanece en Ushuaia lluvioso y frío, demasiado frío para ser enero. La temperatura por la noche llegó a estar cerca de los 0º C razón por la cual a la mañana podían observarse todos los picos nevados tanto de un lado como del otro del Canal de Beagle.
El frío obligó a Roslie a tener que adquirir un gorro ya que además nos preparábamos para salir en velero por el Canal de Beagle.
Antes de arribar al velero de la empresa Tres Marías, pasamos por el puesto que tienen cerca de la entrada del puerto. Allí además de confirmar las reservas y de saldar la cuenta pendiente, nos dieron chocolate caliente para la exigente y fría jornada que nos esperaba.
Todos le preguntaron a Axel. "Che vos no tenés frío!!!"









Luego de tomar un buen chocolate caliente, nos dirigimos con los guías hacia la entrada al puerto y pasamos ya con la tasa de uso de puerto ya adquirida de modo tal que nos obviamos cualquier posible demora en la entrada del mismo.
Caminamos unos metros hasta donde se encontraba amarrado el antiguo buque Barracuda, pasamos hacia el y desde allí hasta la otra amarra donde se encontraba el velero.





Ya arriba del velero comenzamos a navegar lentamente hasta la altura en donde se encuentra la pista de aterrizaje del Aeropuerto Internacional de Ushuaia. En ese momento dejamos de andar con motores para navegar a vela. El viento era realmente impresionante y eso ayudaba a que fuéramos a una agradable velocidad de crucero disfrutando del Canal de Beagle.




Así es como disfrutábamos de nuestra vista de Ushuaia desde el Canal de Beagle. A lo lejos podían observarse las montañas completamente nevadas y las espesas nubes amenazantes de tormenta. Justamente en el día anterior, y dependiendo de las condiciones climáticas, nos dijeron que a pesar de no ser costumbre de la empresa hacer la excursión hasta el Faro Les Esclareurs lo iban a hacer. 


La primer parada interesante fue en la Isla de Lobos en donde había una colonia de Lobos Marinos importante acompañada de cientos de Cormoranes Imperiales. 





Nuestra agradable navegación continuó por el Canal hasta la Isla de los Pájaros cuya presencia fue ahuyentada por la mano del hombre que dejó sin alimento a las aves, las cuales se trasladaron a la Isla del Faro Les Esclareurs y por esa razón era que íbamos a llegar hasta allí. Dadas las condiciones climáticas imperantes en el Canal y los informes negativos que surgían de prefectura a la cual el velero estaba en constante comunicación vía radio es que no se pudo llegar hasta allí.
Unos minutos después llegamos a una isla denominada H dada su forma en la que permanece conectada sus dos partes por un pequeño y estrecho camino.



Al llegar a la misma dejamos el pequeño velero recalado a un costado de las rocas y debimos trepar por ellas hasta tierra firme. Comienza aquí un trekking por esta isla a la que no llega todo el mundo ya que la mayoría hace su caminata en la Isla Bridge.
Allí observamos la rica flora existente en la isla. Lo más sorprendente fue ver yaretas, especie vegetal que también crece en la Puna.






El trekking continúa hasta la otra punta de las islas en donde había una importante cormoranera de la especie imperial. Habíamos estado allí por espacio de una hora y luego de ello seguimos nuestro rumbo hacia el mar nuevamente.



Con la noticia desilusionante de no poder conocer el Faro Les Esclareurs en donde nos habían dicho que existía la posibilidad de ir y que se frustró por las condiciones imperantes, nos volvimos lentamente a Ushuaia disfrutando del hermoso entorno de sus costas. Sin dudas, pese a la mala noticia, fue una muy linda excursión. Faro quedarás para otra vez!!!





Así es como llegamos nuevamente a Ushuaia...pero aquí no termina el día...más bien todo lo contrario...empieza!!!


9 de mayo de 2010

RECORRIDA POR LOS PUEBLOS ORIGINARIOS DE TIERRA DEL FUEGO.


Llovía incesantemente sobre Ushuaia y la mejor opción frente a ese frío y lluvia era la de recorrer algunos museos.
Ya habíamos visto el Museo Marítimo y Presidio de Ushuaia, el Museo del Fin del Mundo, la Antigua Casa de Gobierno y la Antigua Casa Beban, nos faltaba recorrer el Museo Yamana. Hacia allí fuimos.
La creencia popular de lo enseñado durante la escuela es que en Tierra del Fuego habitaban los Onas. Si bien los Onas controlaban un 80% del territorio estos no fueron los únicos. En la zona Chilena de Tierra del Fuego también habitaban los Alakaluf, en la zona de la Península Mitre los Haush y en la zona de los canales los Yámanas. 
Estos últimos son los habitantes originarios de la zona correspondiente a Ushuaia, de ahí su reivindicación para con ellos en la ciudad recordándolos con un museo.
Los Onas eran hábiles cazadores de contextura grande y extremidades muy desarrolladas, especialmente las correspondientes a sus piernas que les permitían recorrer grandes distancias en búsqueda de la presas que cazaban.
Su nombre verdadero era Shelknam ya que Ona es una palabra Yagán. Lamentablemente con la llegada del hombre blanco, los onas se extinguieron rapidamente y ya a mediados del Siglo XX solo sobrevivían algunos descendientes.
Los Haush o Manekenk eran una tribu que compartían muchas cosas en común con los Shelknam. Habitaban en la zona de la Península Mitre y poco se saben de ellos ya que a la llegada del hombre blanco, sólo sobrevivía un pequeño grupo y a principios de siglo XX ya tan solo se contaba con 4 personas.
Los Alakalufes o Kawésqar habitaban en la zona de canales, estrechos y fiordos de Chile (desde Puerto Natales hasta la zona del Estrecho de Magallanes en Tierra del Fuego). Los últimos habitantes que hablan su idioma se encuentran en la Isla Wellington en Chile.
Por último los Yaganes o Yámanas habitaban la zona del Canal de Beagle e islas adyacentes tanto del lago Argentino como de Chile. Su estructura corporal era pequeña y vivían gran tiempo en canoas. La mujer tenía a cargo la conducción de las canoas hechas con madera de lenga, el hombre se dedicaba a la caza  de peces y moluscos y los niños a mantener el fuego dentro de la canoa, como así también a sacar el agua que se filtraba en la misma. Pese al frío imperante en la zona andaban desnudos completamente gran parte del tiempo y pocas eran las veces que se cubrían con alguna piel. Siempre se untaban en grasa animal que les permitía tener un aislante natural que los mantenía impermeables.
Con la llegada del hombre blanco, sus costumbres fueron cambiadas radicalmente. Al Yámana se lo utilizó para mano de obra en las estancias, al igual que a los Onas, se lo quiso vestir por el mal aspecto que ofrecían desnudos y nadie le enseñó que cuando llovía debía retirarse la ropa mojada del cuerpo. Esto resultó fatal para la comunidad dejándola diezmada por las enfermedades y haciendo que ya en 1920 casi no quedaran vivos. Hoy sólo sobreviven unos pocos del lado Chileno cerca de Puerto Williams, en la Isla Navarino.


Así fue que recorrimos el último museo que teníamos por recorrer y luego nos dimos a la tarea de seguir paseando por Ushuaia tratando en lo posible de evitar esa fina y fría llovizna que azotaba la ciudad. A lo lejos veíamos como a uno y otro lado las montañas estaban cubiertas por un manto blanco de nieve.

6 de mayo de 2010

EN 4X4.

A la mañana temprano denotamos que se abatía sobre Ushuaia una lluvia lo suficientemente molesta como para andar paseando por la Ciudad o como para hacer la excursión por el Canal de Beagle. 
Dadas las condiciones y como teníamos en vista la posibilidad de hacer una excursión en 4x4, consideramos que esta eran condiciones inmejorables como para transitar por caminos bien embarrados en donde las máquinas tengan que mostrar lo que son capaces de hacer.
Para ello nos fuimos a una ya recomendada empresa de viajes y turismo, Canal Fun & Nature, recomendada en revistas especializadas como también en las dependencias públicas de la Casa de Tierra del Fuego y en Turismo de la Municipalidad de Ushuaia.
Así fue que con una fina y persistente lluvia, nos fuimos hasta la agencia ubicada en la calle 9 de Julio al 100. 
Al llegar eran las 8.50 horas, razón por la cual esperamos hasta las 9, horario en el que abría.
Junto a nosotros llegaba atrás otras dos personas que estaban averiguando sobre excursiones.
Apenas abrieron les comentamos nuestras intensiones y le preguntamos si tenían lugar para ya mismo. Consultó y justo tenían lugar para dos personas en uno de las dos Land Rover Defender que iban a salir a las 9:30 horas.


En nuestro contingente íbamos todos hispanos parlantes, 7 Argentinos y un Español así que inusualmente no  había inconvenientes con el idioma. 
Lejos de la rutina de las excursiones convencionales, esta excursión es apta para todo viajero que busca pasar un momento de aventura sazonado con la buena onda que le ponen los guías de la empresa quienes cada tanto iban modulando con la radio haciendo chistes.
Como el disfrute jamás depende del clima y la lluvia ponía a los caminos que eran huellas mineras en pésimo estado, las Defe estaban "como pez en el agua".
La primer parte del recorrido es por la Ruta Nacional Nº 3 razón por la cual no abundaremos en detalles sobre este tramo de la excursión que aprovechamos principalmente para conocernos, intercambiar opiniones y pasarla bien entre todos.



Al arribar al la zona de Lago Escondido las nubes estaban tan bajas que no podía divisarse el lago propiamente dicho, razón por la cual todos estuvimos de acuerdo en que haríamos una parada en el Paso Garibaldi a la vuelta suponiendo que contaríamos con mejor suerte.
Una vez pasado el Lago Escondido tomamos una huella minera que transita sus primeros kilómetros en un camino de tierra bastante bien asentado pero que a medida que nos adentramos en la misma, empeora notablemente.
Aquí comienza la aventura!!!



Nunca antes visto por nosotros en un momento el conductor de la Defe que iba por delante nuestro se manda atrás y camina sola.  Realmente increíble lo que estos vehículos pueden hacer. Es que tienen un sistema inteligente que permite que vayan solos en un trayecto mientras que el conductor "arregla el camino" adelante.


Así fue que luego de ello, hicimos un parate con una primera vista del Lago Fagnano. 






Una vez que dejamos atrás esta primer vista del Lago Fagnano, fuimos en conquista del mismo. Pero antes de llegar debimos transitar por una huella que muchas veces nos samarreó de un lado para otro como si fuera que estuviéramos en un bote en pleno mar bravío. La adrenalina comenzaba a aumentar entre quienes estábamos dentro de las Defe.




Cuando por fin llegamos al Lago Fagnano lo hicimos bordeándolo por su costa. Dado a que se encontraba crecido es que las olas del lago golpeaban la chata. Sin dudas fue una maravillosa experiencia.





Y así fue que cruzamos el Lago Fagnano por su costa y terminamos en una zona en donde se encuentra el Lago Bombilla.



Nos esperaba un largo y embarrado camino de media hora hasta la desembocadura del Lago Bombilla con el Lago Fagnano. Mientras tanto y sin importar cuanto se embarraban las zapatillas y los pantalones íbamos tomando fotos del lugar.







Llegados al Lago Fagnano, lo que resta es caminar hasta el refugio en donde nos espera una muy rica comida que iban preparando nuestros guías.





Luego de comer una buena picada y un inmejorable asado de cordero, además de hongos comestibles extraídos del bosque de la zona, nos dirigimos nuevamente a la zona del Lago Escondido donde pudimos apreciar el paisaje, ya mucho más despejado.




El paisaje que se puede apreciar desde el Paso Garibaldi, llamado así no por el ilustre Italiano, sino por Luis Garibaldi Honte cuya madre era originaria de Tierra del Fuego (perteneciente a la tribu Haush) y que constituye el paso cordillerano entre Río Grande y Ushuaia, siendo esta la única ciudad trasandina del país.
Había dejado de llover momentáneamente pero el frío y el viento era realmente muy intenso. 
Adelante, en Ushuaia nos esperaba un tiempo tormentoso. Pero esa es otra historia...