12 de diciembre de 2010
10 de octubre de 2010
EL BLOG CUMPLE 5 AÑOS...
Y lo festejamos con una foto de cada año....
Foto de la Iglesia de Iruya en Salta - Noroeste Argentino 2005.
Foto del lateral de la Iglesia de Antofalla en Catamarca - Noroeste Argentino 2006.
Foto del Cañón del Atuel en Mendoza - Cuyo 2007.
Foto en el Altiplano de Bolivia camino al Desierto de Siloli en Bolivia - Bolivia y Noroeste Argentino 2008.
Foto en un atardecer en el Valle de la Luna de San Pedro de Atacama, Chile. - Chile y Noroeste Argentino 2009.
Navegación en el Canal de Beagle, Tierra del Fuego - Patagonia Austral 2010.
27 de junio de 2010
BALANCE.
Tras la crónica del viaje por la Patagonia y a seis meses de finalizado el mismo merece que el mismo sea sometido a un balance con sus aspectos positivos y negativos.
Sabemos lamentablemente lo altamente costoso que es para los Argentinos viajar en general a cualquier punto de la Patagonia ese es el primer punto negativo. Sabemos también de la belleza infinita que compensa en gran parte ese sacrificio, por lo tanto en esta contraposición de aspectos positivos/negativos podemos decir que estamos compensados.
Yendo específicamente a nuestro viaje, estuvimos tres horas en Comodoro Rivadavia, tres días (casi cuatro) en Puerto Deseado, uno en Río Gallegos, cuatro días en el Calafate (uno en excursión desde allí a El Chaltén), un día entero de viaje en micro hasta Ushuaia y seis días (casi siete) en Ushuaia.
La mínima estadía en Comodoro Rivadavia merece destacarse como altamente positiva más cuando las cosas no habían comenzado del todo bien con el extravío del equipaje de Axel. Si el equipaje de Axel no hubiera aparecido en forma tan rápida merced a la presión que logramos hacer entre los damnificados hubiera sido un muy mal comienzo de vacaciones. Y más cuando Comodoro Rivadavia tiene poco para mostrar y no presenta grandes atractivos.
Un lugar que merece destacarse como muy positivo es Puerto Deseado, lugar en el que estuvimos tres días y medio, casi cuatro, y lo conocimos a fondo aunque creemos que con dos días y medio hubiera estado más que bien.
Respecto de Río Gallegos realmente era necesario pasar por allí para poder realizar las combinaciones posteriores a la vuelta de El Calafate como para ir hacia Ushuaia, pero aún no comprendemos porque nos quedamos un día allí.
Lamentablemente cuando planificamos las vacaciones dijimos que valía la pena quedarse allí para hacer base y conocer desde Río Gallegos algún lugar cercano por medio de excursiones, pero nada había allí. Las expectativas respecto de esta ciudad estuvieron muy por encima de lo que resultó ser y, más allá de un paseo básico por la misma, no tiene absolutamente nada de atractivo.
Respecto de El Calafate creemos que hubieran sido suficientes dos días y que El Chaltén merecía algo más de tiempo y no una simple excursión. En este sentido creemos que hemos sobredimensionado nuestra estadía allí a punto tal que en el cuarto día no sabíamos que hacer y, por otra parte, no hemos tomado las decisiones más correctas a la hora de conocer lugares cercanos como por ejemplo ir a las Torres del Paine o quedarnos en el Chaltén.
Por último en cuanto a Ushuaia fue muy acertado tomar la decisión de aceptar el ofrecimiento por parte de Chiqui para alojarnos en su casa. Esto nos permitió vivir una estadía en Ushuaia distinta junto a una gran persona como lo es ella y, a la vez, conocer la ciudad y sus alrededores a fondo. Talvez hubo algún día demás o nos faltó algo más de dinero para poder encarar una excursión más y conocer la Estancia Haberton pero el balance allí es altamente positivo.
Podemos decir que lo que más nos ha gustado del viaje ha sido su principio (Puerto Deseado) y la última morada del mismo (Ushuaia), quedando relegada a un tercer lugar El Calafate y sus alrededores y lejos, muy lejos, Río Gallegos y Comodoro Rivadavia lugares que poco podemos rescatar de ellos.
Respecto de Río Gallegos realmente era necesario pasar por allí para poder realizar las combinaciones posteriores a la vuelta de El Calafate como para ir hacia Ushuaia, pero aún no comprendemos porque nos quedamos un día allí.
Lamentablemente cuando planificamos las vacaciones dijimos que valía la pena quedarse allí para hacer base y conocer desde Río Gallegos algún lugar cercano por medio de excursiones, pero nada había allí. Las expectativas respecto de esta ciudad estuvieron muy por encima de lo que resultó ser y, más allá de un paseo básico por la misma, no tiene absolutamente nada de atractivo.
Respecto de El Calafate creemos que hubieran sido suficientes dos días y que El Chaltén merecía algo más de tiempo y no una simple excursión. En este sentido creemos que hemos sobredimensionado nuestra estadía allí a punto tal que en el cuarto día no sabíamos que hacer y, por otra parte, no hemos tomado las decisiones más correctas a la hora de conocer lugares cercanos como por ejemplo ir a las Torres del Paine o quedarnos en el Chaltén.
Por último en cuanto a Ushuaia fue muy acertado tomar la decisión de aceptar el ofrecimiento por parte de Chiqui para alojarnos en su casa. Esto nos permitió vivir una estadía en Ushuaia distinta junto a una gran persona como lo es ella y, a la vez, conocer la ciudad y sus alrededores a fondo. Talvez hubo algún día demás o nos faltó algo más de dinero para poder encarar una excursión más y conocer la Estancia Haberton pero el balance allí es altamente positivo.
Podemos decir que lo que más nos ha gustado del viaje ha sido su principio (Puerto Deseado) y la última morada del mismo (Ushuaia), quedando relegada a un tercer lugar El Calafate y sus alrededores y lejos, muy lejos, Río Gallegos y Comodoro Rivadavia lugares que poco podemos rescatar de ellos.
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21 de junio de 2010
ULTIMOS MOMENTOS.
Fue sin dudas un momento extraño y realmente con sentimientos encontrados. Así transitamos nuestras últimas horas en el confín austral de nuestro suelo en el que tan bien nos sentimos y al que sin dudas volveríamos en otra ocasión.
Traicionando nuestra costumbre en esta ocasión nos levantamos bastante tarde - a las 9 horas - y desayunamos. Luego de ello nos fuimos a pasear por la calle San Martín y por la Avenida Maipú a dar nuestras últimas recorridas por la ciudad, mientras comprábamos regalos a nuestros parientes y amigos.
Así fue que pasamos gran parte del día hasta que se hicieron las 18 horas, momento en el que dejamos la casa de Chiqui para tomarnos un taxi hacia el Aeropuerto Internacional de Ushuaia.
Mención aparte merece destacarse las instalaciones del Aeropuerto Internacional de Ushuaia quien a pesar de ser pequeño es realmente muy moderno.
Allí tomamos un café y despachamos el equipaje. El miedo a que despáchasen en forma equivocada el equipaje se disipó al momento en que nosotros pasamos hacia la sala de espera vidriada y vimos de casualidad como las colocaban dentro de las cajuelas de equipaje del avión.
Subimos al avión de Austral - operado por Aerolíneas Argentinas - y volamos hacia Buenos Aires nuevamente. Eran las 20:35 horas y estas son las últimas imágenes de esta maravillosa tierra austral.
Mientras cae la tarde y el avión ascendía hasta pasar por encima de las nubes haciendo ya invisible el paisaje, la maravillosa naturaleza nos regalaba una vez más otras postales.
18 de junio de 2010
DESPUES DEL GLACIAR...EL PRINCIPIO DEL FIN.
Después de nuestra estadía en el Glaciar Martial, bajamos en aerosilla hasta la base y como teníamos ganas de "almorzar" - eran como las 16:30 horas - nos dirigimos a la Casa de Té que está en la base. Allí descansaba plácidamente en ese páramo un hermoso perro San Bernardo quien posó para la foto. Comimos y luego nos fuimos caminando desde la base del Glaciar hasta la entrada a la Ciudad, momento en el que Roslie pidió seguir en taxi debido al dolor en su pie producto del todavía desconocido quiste sinovial que le afectaba el empeine del mismo.
En el camino fuimos fotografiando y disfrutando de la hermosa vista que hay en el camino hacia la Bahía de Ushuaia.
Llegados a poco menos de diez cuadras del centro el pie de Roslie no dió para más razón por la que tomamos un taxi en dirección a la casa de Chiqui y descansamos un rato mientras tomábamos mates.
Luego de ello salimos a pasear por el centro de la Ciudad cenando un rico cordero con papas fritas a las 23 horas. Así finalizaba nuestro último día completo en Ushuaia.
Al día siguiente comenzamos el día poniendo todo en orden en casa de Chiqui y yendo a comprar los últimos regalos para la familia y uno muy especial para Chiqui a quien mucho tenemos todavía que agradecerle.
No hicimos mucho más en este día de preparativos, más que recorrer un poco la ciudad, comprar regalos y despedirnos poco a poco de esta bella ciudad a la que tanto queremos.
Así comenzamos a despedirnos de Ushuaia....será hasta la vuelta linda perla austral de nuestro suelo!!!
15 de junio de 2010
UNA VEZ MAS EN EL GLACIAR MARTIAL.
Una jornada más había finalizado con el paseo en el Double Decker y la recorrida por las calles de Ushuaia. El tiempo que estaba lluvioso había mejorado sensiblemente a tal punto que despuntó durante algunos minutos un tenúe sol.
Fuimos al supermercado de la esquina de la casa de Chiqui, compramos algunas cosas y con la misma fuimos a lo de Chiqui para tomar unos mates con ella.
Al llegar nos encontramos con la sorpresa de verla a Chiqui que yendo y viniendo a uno y otro lado de la casa preparaba su bolso...para irse a Buenos Aires!!!
"Chicos sepan disculpar conseguí adelantar el pasaje me voy en una hora, quédense tranquilos hagan que esta casa es su casa. Uds. tienen su llaves no necesitan irse de aquí si yo no estoy, pueden quedarse tranquilos".
Sorprendidos por el adelantamiento del viaje no sabíamos que decir ni que hacer, pero ante la gran confianza que depositó ella en nosotros y las indicaciones básicas sobre algunas cuestiones de la casa no nos quedó otra que despedirnos de ella deseándole un muy buen viaje.
Y ahora ¿qué hacemos nos preguntamos?
Fue la primera noche en la que decidimos acostarnos tan temprano que al final de cuenta todavía no había caído el sol.
Al día siguiente nos levantamos a las 7 de la mañana. Desayunamos y Axel salió a ver que tal estaba el día. Salió con una simple remera de manga larga y dijo que no había frío. Realmente no sé si era que ya nos habíamos acostumbrado a los fríos días de Ushuaia o que pero en realidad había 2,3º, temperatura suficiente como para hacer tiritar de frío a más de uno, y no se sentía.
Salimos a caminar por la Ciudad en un día que se encontraba por momentos soleado y denotamos que había caído abundante nieve en los cerros.
Maduraba en la cabeza de Axel ir nuevamente al Glaciar Martial y hacía allí fuimos nuevamente para verlo esta vez distinto a la primera vez en la que habíamos ido.
Compramos algunos regalos y caminamos un rato y luego de pasar por la casa de Chiqui, nos dirigimos nuevamente al Glaciar Martial.
Y así fue como a las 12 horas estábamos nuevamente allí en la base del Glaciar Martial preparados para subir en aerosilla.
El imponente paisaje de las montañas completamente nevadas era bastante distinto del visto unos días atrás, así fue que la elección de volver al glaciar había sido un verdadero acierto.
Subimos en principio hasta la cota de 800 metros y allí nos quedamos durante un rato largo en el cual jugamos con la ya abundante nieve que allí había. Atrás podía verse en todo su esplendor la Bahía de Ushuaia desde una vista a la que no habíamos llegado antes.
Por momentos el tiempo desmejoraba razón por la cual decidimos en principio quedarnos en la cota de 800 metros y eventualmente bajar si persistía el mal tiempo, pero sólo se trataba de algunas nevadas pasajeras.
Así fue luego de que el tiempo se volvió a despejar, decidí seguir subiendo hasta la cota de 1000 metros.
Y así fue que nos despedimos del Glaciar Martial. Será hasta la próxima!!!
30 de mayo de 2010
PASEO EN EL DOUBLE DECKER.
Uno de los paseos típicamente turísticos de Ushuaia es el Double Decker. Transcurría la tarde en la Ciudad y sin mucho más para ver fue que decidimos tomar este simpático ómnibus de dos pisos Londinense para recorrer la ciudad desde otra perspectiva.
El mismo funciona desde el año 2000 y recorre los principales puntos de la ciudad con guía bilingüe a bordo. Así fue como a las 15:30 corrimos al famoso "bondi del fin del mundo" desde media cuadra hasta el lugar de donde sale en San Martín y Juana Fadul.
Casi no llegamos pero al fin y al cabo llegamos. El micro estaba casi vacío y éramos uno de los pocos hispano parlantes allí a bordo.
La recorrida en el Double Decker o colectivo de dos pisos incluye su recorrida por los edificios históricos de la Ciudad. Entre ellos se destaca la sede del Correo Argentino realizada íntegramente por los presos del Presidiario del Fin del Mundo o Presidio de Ushuaia.
Nuestro paseo continúa por las principales calles del casco histórico de Ushuaia desde el que nos han explicado que hasta 1960 llegaba hasta la calle Gobernador Paz (la cuarta calle de la ciudad desde la costa), calle en la que queda hoy la casa de Chiqui en donde nos hospedamos.
Seguido a ello entramos al Museo del Presidio y Museo Marítimo lugar en donde se han bajado el 70% de los pasajeros. Cabe destacar que el Double Decker une los tres museos más importantes de la ciudad, a saber: Museo del Presidio, Museo del Fin del Mundo y Museo de la Antigua Casa de Gobierno (todos ellos muy cercanos entre sí y que bien pueden hacerse a pie como lo hicimos nosotros en su momento).
Una vez que se bajaron una gran mayoría de los pasajeros, el camino continuó por el casco céntrico pasando por más casas históricas.
Mientras tanto nos dirigimos por la calle Gobernador Paz hacia el Parque Centenario en donde se encuentra uno de los puntos panorámicos de la Ciudad.
Luego seguimos nuestro camino hacia donde se encuentra la Bahía encerrada y el actual aeródromo de la Ciudad, lugar en el que antiguamente funcionaba el aeropuerto de Ushuaia. Desde allí nos tomamos la foto que aparece en la portada de esta entrada y las que se encuentran más abajo.
A medida que bajábamos, podíamos observar los picos nevados de las montañas que rodean a la Ciudad de Ushuaia.
Una vez que se bajaron una gran mayoría de los pasajeros, el camino continuó por el casco céntrico pasando por más casas históricas.
Mientras tanto nos dirigimos por la calle Gobernador Paz hacia el Parque Centenario en donde se encuentra uno de los puntos panorámicos de la Ciudad.
Luego seguimos nuestro camino hacia donde se encuentra la Bahía encerrada y el actual aeródromo de la Ciudad, lugar en el que antiguamente funcionaba el aeropuerto de Ushuaia. Desde allí nos tomamos la foto que aparece en la portada de esta entrada y las que se encuentran más abajo.
A medida que bajábamos, podíamos observar los picos nevados de las montañas que rodean a la Ciudad de Ushuaia.
Con nosotros el protagonista del paseo!!!
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