La salida de Santa María a Belén estaba programada a las 3 AM del día Lunes 16 de Enero con el Expreso San Cayetano. Así fue que salimos del Hotel Pérez a las 23 horas haciendo tiempo y nos instalamos cómodamente en la terminal de Santa María. Había mucha gente, muchos que se iban nuevamente a San Miguel de Tucumán, otros que partían hacia Tafí del Valle y los menos a Belén.
Las horas pasaban y pasaban y el micro no llegaba...hasta que llegó el momento de tomar el micro.
Poco antes de salir, Roslie me pregunta ¿y cómo es el micro?. Yo que había visto un micro estacionado cuando íbamos hacia el Monumento a la Pachamama le dije: "mirá muy lindo que digamos no es pero me parece que zafa"...vaya que le he errado era el mismísimo espantomóvil el que se hacía presente a las tres en punto. Roslie me dice "eso es?". Yo, tragando saliva y viendo el desvencijado micro, no tengo alternativa en afirmarle asintiendo con la cabeza. En honor a la verdad tampoco esperaba semejante cacharro viejo!
Subimos, el aspecto era peor que sus exteriores.
El chofer, acompañado de un pequeño perro en la parte delantera del conductor apura...
- Suban, suban!
Axel dice:
- "Jefe, ¿dónde dejamos las mochilas?"
- Atrás de todo, nos indica el chofer. Suban, suban después al bajar me pagan!
Roslie me dice:
"Gordi busca un asiento que tenga tapizado!"
En efecto, los asientos estaban desprovistos en gran parte de tapizado y los asientos reclinaban por su propia fuerza de gravedad.
"Yo no puedo creer que haya gente que viaje así!!!" decía Roslie. Yo tampoco.
Nos separan 172 Km. de Santa María a Belén o bien, cuatro horas y media de tortuoso viaje en el espantomóvil.
Créase o no, el espantomóvil llegó a destino en horario.
Calle Rivadavia.
Monumento a Nuestra Sra. de Belén en lo alto de la Ciudad.
Al bajar en la terminal de Belén, todas las boleterías estaban cerradas, razón por la cual desayunamos primero y luego nos fuimos hasta el Hotel Gómez, sito en la Avenida Calchaquí 213.
Subimos por la calle Rivadavia y vimos estacionada en el garage de su casa la camioneta de Mauricio Pagani, dueño de Chaku Aventuras, y le dije a Roslie "después vamos a preguntar por alguna excursión".
Llegamos al Hotel Gómez, y mientras Roslie descansaba brevemente en el hotel, me fui a la terminal nuevamente para abonar los pasajes reservados a Antofagasta de la Sierra y hacer algunas averiguaciones acerca del dato de un lugar que mi amigo Chugo pidió mantener en reserva, pero al que no hubo forma de encontrar quien nos lleve hasta allí. Así que amigo Chugo el "lugar secreto" quedó para otro capítulo.
En el camino de vuelta pasé nuevamente por la casa de Mauricio y denoté que su camioneta ya no estaba. Toco la puerta y me atiende su esposa quien muy amablemente me dijo que se acababa de ir en una excursión a Laguna Blanca.
Debo confesar que si bien no se encontraba entre nuestros planes hacer una excursión a Laguna Blanca, el sólo hecho de haber escuchado su nombre me dio ganas de ir (de paso lo conocía Roslie quien no lo conoce) y por supuesto mucha bronca por no poder hacerlo.
Pese a estos infortunios, Belén tiene mucho para conocer en sus alrededores y el plan inicial contemplaba la posibilidad de conocer el día martes 17 a Londres y el Shincal de Quimivil. Finalmente, y en virtud de los hechos hasta aquí descriptos, anticipamos el plan y fuimos hasta allí.
Boleto al Shincal de Quimivil
3 comentarios:
Vale el intento! Quedará para la próxima ;-)
Abrazo.
Muy buena cronica!!! ya se viene la puna!!!
¿No hay fotos del espantomovil?
Un abrazo!!
Así es Chugo el lugar secreto queda todavía en archivo hasta una nueva ida.
Tata: del espantomovil no tengo fotos pensé en sacarle pero de noche no salen demasiado bien con la cámara.
Se viene pronto la Puna, faltan algunas entradas todavía!!!
Abrazos a ambos!!!
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