24 de febrero de 2006

UN PAISAJE TAN GRANDIOSO COMO UNICO Y MAGNIFICO: LA QUEBRADA DE LAS CONCHAS.














El recorrido de la Quebrada de las Conchas es una verdadera maravilla y hacemos votos para que la UNESCO lo declare Patrimonio Natural de la Humanidad.
Una sucesión impresionante de montañas de distintas formas caprichosas erosionadas por el viento es surcada por la Ruta Nacional 68 que une a Cafayate con la Ciudad de Salta. Son en total 63 km. de verdaderas bellezas.
Al llegar a Alemanía (se escribe con tilde en la i a diferencia del país que no va con tilde) comienza la Quebrada homónima que luego se llamará Quebrada de Cafayate o de las Conchas al entrar en el departamento de Cafayate.
En el camino nos acompaña el Río de las Conchas, río que, desemboca en el Dique Cabra Corral y da origen al Río Pasaje o Juramento el cual más abajo se llamará Salado del Norte.
El lugar es para devorárselo con la vista, ir despacio y disfrutar de cada una de las imágenes que deja en el camino el paisaje. Ir y volver porque según como de el sol el paisaje luce distino.
Entre sus paisajes podemos identificar muchos hitos en el camino como Tres Cruces, El Sapo, El Fraile, Los Castillos, El hundimiento del Titanic, El Obelisco, Las Ventanitas, La Yesera, Los médanos y mención aparte tienen el Anfiteatro en donde la Sínfonica de la Provincia de Salta ha tocado un concierto porque es tan bella la acustica que tiene que hasta el más desafinado tiene una hermosa voz, un escenario natural único en donde muchas veces se juntan las bagualeras y con sus cantos se la pueden oir desde muchos kilómetros a la distancia. También mención aparte es la Garganta del Diablo, un lugar en donde al introducirte en él pareciera que la montaña te va a tragar, una belleza natural digna de conocer.















CAFAYATE, LA BELLA.

Tierra del sol, del buen vino, un excelente clima, en el medio de un valle hermoso, esa es Cafayate una ciudad en donde todo es verdaderamente bello, sus paisajes, su camino, sus calles, su plaza, su iglesia, sus bodegas.
Cafayate tiene realmente todo para quien la quiera visitarla, desde sus buenos atributos climáticos, hasta una infraestructura hotelera y gastrónomica excelente. Y a ella debemos agregarle una curiosidad el famoso helado de vino en sus variantes torrontés (blanco) y Cavernet Sauvignon (tinto), helado al que algunos "imitadores" tratan en Buenos Aires de copiar pero que nunca va a ser igual de rico. Visitar Cafayate vale la pena y si Cafayate les gustó esperen a ver el próximo post del Blog que muestra su camino entre esta ciudad y Salta.

No se lo pierdan!!!








CACHI, PUEBLO DE SAL.

Después de trepar la Cuesta del Obispo, llegar a la Piedra del Molino, seguir por el Parque Nacional de los Cardones y encarar la recta del Tín Tín, se llega al poblado de Payogasta.
Desde allí unos pocos kilómetros más al sur se encuentra este hermoso pueblo cuyo vocablo significa pueblo de sal, en alusión a que los Incas creyeron que el nevado del Cachi (o Cerro Libertador Gral. San Martín) era un gran cerro de sal.
Se trata de un pueblo que conserva en forma intacta su arquitectura, con sus típicos farolitos y callecitas, sus costumbres y todo el encanto típico de los Valles Calchaquíes que se proyectan como una verdadera Meca para el turismo de quienes se dirigen al Noroeste Argentino. Enclavado sobre la confluencia de los Ríos Cachi y Calchaquí allí podremos encontrar los mejores cultivos de pimientos del país, cuyo sabor lo hace único. Lamentablemente para nuestro gusto hubiesemos querido estar más tiempo allí para conocer mejor sus alrededores pero lamentablemente no pudimos, seguramente en otra ocasión podremos descubrir más de su belleza.




16 de febrero de 2006

EN EL CAMINO A CACHI: QUEBRADA DEL ESCOIPE, CUESTA DEL OBISPO, PARQUE NACIONAL LOS CARDONES Y RECTA DEL TIN TIN.













El camino a Cachi transcurre primero por la Ruta Nacional 68 atravesando el Valle de Lerma y pasando por las ciudades de Cerrillos, La Merced y El Carril. Hasta allí la vegetación característica es la de abundantes plantaciones de tabaco y del afincamiento de la Tabacalera Alliance One (Ex - Nobleza Piccardo).

Ya en las cercanías de Chicoana, se toma el desvio por Ruta Provincial 33 y el camino empieza a tomar otras características encajonándose en quebradas y siendo surcadas por caudalosos ríos.
Así es como llegamos a San Fernando de Escoipe, pueblito famosamente conocido por las fotos de la Secretaría de Turismo de Salta (la foto es la de la iglesia a lo lejos con el cardón de costado). Siguiendo viaje cruzaremos algunos puentes de madera e hierro los cuales seguramente pasarán a la historia cuando asfalten la ruta hasta el pie de la cuesta (prometieron no asfaltar la cuesta espero que cumplan porque sino pierde su encanto).
La cuesta del Obispo se trata ni más ni menos de un antiguo camino emprendido por un obispo al cual para llegar a los Valles Calchaquíes tuvo que atravesar estos caminos. Primero se le denominó Cuesta de la Dormida del Obispo, ya que se supone que ha dormido en algunos de estos lugares, pero al quedar un poco feo este nombre se decidió acotarle el nombre al actual. Esta cuesta, una de las más maravillosas de Argentina, tiene 42 km. de largo y termina en su punto más alto denominado la Piedra del Molino a 3348 metros sobre el nivel del mar.
A partir de allí nos encontramos con el Parque Nacional Los Cardones el cual alberga cientos de especies cactáceas, entre ellas una muy curiosa cuya flor crece al ras del suelo.
Siguiendo por Ruta 33 empalmamos con la mítica Ruta Nacional 40 y allí nos encontramos con la Recta del Tin Tin, antigua recta Incaica que ellos mismos han construido marcando como mojones fogatas colocadas a una distancia determinada. En este paso la Ruta Nacional 40 ha sido trazada sobre este mismo antiguo camino (hoy lamentablemente asfaltado). La recta tiene 12 km. de largo y un desvío de tan sólo menos de un milimetro de error (toda una perfección). A mano izquierda (siempre teniendo en cuenta que se va a Cachi) nos sorprende la Paleta del Pintor una autentica belleza de la naturaleza.
Ya antes de llegar a Cachi se pasa por Payogasta en cuyo mirador podemos observar cientos de bellezas que las montañas y sus colores junto a los cardones, los ríos, las casitas y el camino nos regalan para embelezar nuestros ojos.
Una recomendación para el viajero mucha precaución en el camino, tocar bocina en las curvas ya van a ver en el camino una gran cruz que señala el trágico accidente de un colectivo donde sus 35 integrantes murieron en el año 1974, claro está que el camino ahora está mejor que en esa época pero igual hay que tener precaución, disfrutar y sentir los paisajes con las sensaciones del alma. La otra recomendación es no se pierdan cada detalle del camino si los lleva un micro mejor porque el que conduce ya no lo hace y puede disfrutar también, cada paisaje es más lindo que el anterior y así sucesivamente con lo cual nada tiene desperdicio. Lugares bellísimos son los que hay camino a Cachi, esa sería su mejor definición.!!!!













14 de febrero de 2006

CIUDAD DE SALTA.














Bella, ordenada, limpia, colorida, la Ciudad de Salta espera de brazos abiertos a los turistas, Argentinos o Extranjeros. Con preferencia de estos últimos quienes vienen copando la parada y hacen que sea corriente escuchar el frío idioma Alemán, el flemático Inglés, el refinado Francés, el alegre Italiano, el Español y por último esa tonada típica de quienes habitamos por estas tierras (decimos por los Porteños), relegando a un segundo plano la característica tonada Salteña.

Salta es una ciudad verdaderamente hermosa que conserva cuidadosamente lo antiguo y lo vincula con equilibrio con lo moderno y hace de ella una ciudad con una arquitectura inigualable que despierta admiración y porque no decirlo un poco de sana envidia.
Es una ciudad que combina en forma armoniosa el movimiento de una gran ciudad con la tranquilidad y seguridad de un pequeño pueblo. Su gente es muy servicial, dispuesta como siempre a tratar de la mejor manera al turista, de modo que la impresión de este sea la de un buen recuerdo.
Enclavada en el Valle de Lerma, seguramente Don Hernando no hubiera podido soñar jamás con una ciudad así.
Sea de noche o de día no pierde encanto alguno, sus vistas desde lo alto del Cerro San Bernardo o bien a la salida de la Ciudad regalan una ciudad absolutamente iluminada digna de una excelente postal. Sus calles, sus plazas y parques, sus angostas vereditas, sus casas, sus monumentos, en fin todo hacen que uno se lleve el mejor de sus recuerdos.
Hay un dicho que han puesto de moda últimamente: "el único riesgo de ir a Salta es...que te quieras quedar a vivir!!!", creemos que tienen mucha razón en decirlo...es una hermosa ciudad!!!.
Pero además de ello es que tiene mucho por recorrer: el Cabildo (eso si es un verdadero museo), el Cerro San Bernardo y su típico ascenso por teléferico, el Parque San Martín, la Catedral, la Iglesia de San Francisco, la Iglesia de la Merced, la Iglesia de la Viña, el Convento de San Bernardo, la Casa Hernández, la Casa Arias Rengel, el monumento a Martín Miguel de Guemes ese héroe enorme que tiene la Patria, el pólemico Museo Arqueológico de Alta Montaña (MAAM) (más adelante verán porque pensamos que es pólemico), los paseos peatonales Florida y Alberdi y la noche de la calle Balcarce.
Todo esto y mucho más tiene Salta para ofrecer, la perlita del Norte Argentino.